Este Rafa, huidizo de reconocimientos y protagonismo, ha logrado que ante la llamada del Club, incluso en partidos que a priori teníamos perdido, hayamos llenado pabellones para demostrar a las chicas de cualquier equipo de nuestro Club, que somos una piña, no solo en las victorias, también en las derrotas. Cuando las fuerzas de nuestras jugadoras comienzan a flaquear, nuestra afición se vuelca con el equipo. Porque somos B.F LEÓN. Somos guerreras. Brindemos pues por nuestro querido RAFA.